El Vlaai, originario del sur de los Países Bajos, es un pastel de masa dulce relleno de frutas frescas. Su diversidad de versiones, adaptada a cada región, se refleja en un diseño libre, con una estructura abierta que permite que el interior respire. Este pastel transmite el espíritu de la variabilidad y la libertad, como un diseño que se adapta a cada momento.